Originalmente el Decreto de Urgencia N° 013-2019 que establece el control previo de operaciones de concentración empresarial, popularmente conocido como Ley antimonopolios, iba a entrar en vigencia en el mes de agosto de 2020. Sin embargo ahora, en mérito a la quinta disposición complementaria final del Decreto Legislativo N° 1510 que modifica dicho DU, su entrada en vigor se ha postergado hasta marzo de 2021.
Para la Asociación Peruana de Consumidores y Usuarios (ASPEC) que realizó una campaña persistente a lo largo del año pasado en favor de la referida ley, esta postergación resulta más que preocupante.
Según ASPEC, en las próximas semanas y meses muchas empresas quebrarán debido a la pandemia COVID-19. En ese escenario los grandes grupos económicos podrán comprarlas a precios ínfimos, lo cual podría generar nuevos oligopolios como el de las AFP, los bancos, las farmacias, la cerveza, etc. cuyas consecuencias padecen todos los consumidores, en especial los de menores ingresos económicos. Por eso, hoy más que nunca, es necesario que las fusiones empresariales sean objeto de escrutinio y aprobación previa por parte del Estado a través del INDECOPI, particularmente si involucran una integración vertical.
En tal sentido es necesario que el Poder Ejecutivo o el Congreso corrijan a la brevedad el mencionado Decreto Legislativo N° 1510 y restituyan la fecha original de vigencia de la Ley antimonopolios para que rija desde este año. Igualmente, se debe declarar que su duración tendrá carácter indefinido, toda vez que en el texto actual se determina que la ley estará vigente por apenas cinco años, lo cual es inaceptable pues los monopolios y oligopolios constituyen una amenaza permanente, no coyuntural.
Si el Perú no cuenta con una Ley antimonopolios vigente, el riesgo de nuevos monopolios u oligopolios podrá extenderse a otros sectores del comercio y la industria en perjuicio de la economía de los consumidores peruanos.